Presentación del libro Cartas que no llegan a su destinatario

Algunas cartas no llegan a su destino, se descaminan misteriosamente. Otros mensajes no llegan porque simplemente el destinatario ya no está.

Este sábado 26 de noviembre se llevó a cabo la presentación del poemario Cartas que no llegan a ninguna parte, dentro de las actividades de la 36 edición de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara 2022.

A través de la poesía Gabriela Cantú Westendarp explora el trascender de la pérdida en la incomprensión de la ausencia que prevalece como un fantasma que ronda nuestro andar cotidiano.

Cartas que no llegan a su destinatario es el poemario publicado por la editorial Vaso Roto, donde la autora mexicana realiza una exploración en torno a la perdida de su padre.

El libro está dividido en siete secciones, en cada una de las cuales se encuentran los textos poéticos que recrean la mirada de quien observa el transitar hacia la muerte y el desasosiego que con esta deviene.

El poemario es también una exploración del cuerpo enfermo y el cuerpo carente, de su relación con el espacio. Cualquier sospecha de una memoria infalible se desmiente, pues no solo se duda de los recuerdos sino que estos reaparecen como en protesta ante las inconsistencias de la realidad, para objetar: ¿No son acaso esas las sábanas que cubrieron su agonía? ¿Recuerdas el frío de aquel primer día de agosto en que notaste, cosa extraña, la quietud repentina de su respiración? ¿Recuerdas del sueño que te contó, ese con un venado cola blanca?

La autora Paulina Vieitez Sabater dialogó con la autora acerca de la escritura como un momento de catarsis, ante lo cual Gabriela recordó dicha catarsis va de la mano con las técnicas de la escritura que posibilitan la lectura de los textos, como sucede a su vez con la imaginación a fin de evocar imágenes a través de las palabras.

¿Cómo convivir con la ausencia? La vida se convierte, quizás, en un transitar entre fantasmas, en un diálogo silencioso, eterno, incompleto, pues muchos son mensajes que no llegan a ninguna parte.

La autora compartió su experiencia durante la escritura del poemario, que fue parte a su vez del proceso de comprender que la muerte es un suceso inevitable.

Cartas que no llegan a ninguna parte es un transitar en la palabra. Desde la paulatina degradación del cuerpo entre sábanas blancas, hasta el desbordar de las palabras que en un momento permanecieron anudadas como un animalillo en la garganta, frases que componen las cartas que no llegaran a su destinatario.