Last Dance: La nueva apuesta entre el cine y la música
Tiempo de lectura: < 1 minuto A través de la unificación filmico-musical, la propuesta busca otra forma de aproximación hacia el artista y su música, al crear una visión original a partir de las herramientas y características del cine hollywoodense.
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“Last Dance” es el short film en el que cine y música convergen como una sola voz, la propuesta de un nuevo género o concepto más allá del formato de videoclip musical.
A través del género Western Horror, el corto dirigido por Diego De Deza y Héctor S. Felix, narra la historia de Lazaro, quien llevado por el amor desafía las barreras entre la vida y la muerte, solo para poder estar una vez más junto a la mujer que ama y poder tener un último baile.
A través de la unificación filmico-musical, la propuesta busca otra forma de aproximación hacia el artista y su música, al crear una visión original a partir de las herramientas y características del cine hollywoodense.
Si bien se ha explorado en diversas ocasiones el acompañamiento del cine a través de la propuesta de bandas sonoras, esta vez música y cine trabajan juntos sobre una misma historia hasta ser una voz.
Acompañando un tema original de la banda de rock Mescalero,“Last Dance”, canción escrita por Alejando Torres, la historia se desarrolla también más allá de las notas, los acordes, dando vida a la letra de la canción a través de la imagen, la magia de los efectos del cine, la viveza de aquellos colores que nos permiten apreciar, ya no cómo suena, sino cómo se ve el amor incluso después de la muerte.
De manera que no se trata solamente de un videoclip más, si no de un short film donde ambas narrativas acompañan y complementan la experiencia del espectador, quien se convierte en parte de la historia.